Oh, hermanos míos, bienvenidos a la crítica, análisis, explicación más completa que encontrareis en cualquier web de cine y porque no decirlo también, de libros.
La primera parte, va sobre como Alex y sus drugos (amigos) hacen literalmente lo que les da la gana.
El método Ludovico es una técnica psicológica que trata de modificar tu subconsciente.
Ah, por cierto, la escena de tortura es real, el actor Malcolm McDowell estaba siendo atendido por un oftalmólogo que le ponía colirio en los ojos para que no se le secarán.
Ahora explicaré el final de la película que es distinto al del libro.
Alex DeLarge es una persona sin empatía alguna y un tirano de manual.
Al final, te das cuenta, de que Alex no es tan inteligente como aparenta ser, solo es fuerte con gente más débil que él.
Dejando de lado un poco el libro.
La película de Kubrick tiene cosas muy positivas.
Rouslan Raychev, Ludwig Van Beethoven o Gioachino Rossini, nos acompañan durante todo el viaje de Alex, primero como algo bueno y luego como algo malo.