Enemigo a las puertas historia real con crítica
«Soy una piedra. No muevo ni un músculo. Lentamente, me pongo nieve en la boca, para que él no vea mi aliento. Me tomo mi tiempo, dejo que se acerque. Solo tengo una bala. Apunto a sus ojos y suavemente, mi dedo presiona el gatillo. Mi pulso no tiembla, no tengo miedo».
Vasili Záitsev (Jude Law)
Jean- Jacques Annaud dirigiendo ‘’Enemigo a las puertas’’ nos brindó una gran película sobre la batalla en Staligrando que tuvo lugar en 1942, en la cual, las condiciones climáticas (el frío) fueron decisivas en el resultado final.
La película es una adaptación de la novela escrita por William Craig, «La batalla por Stalingrado», basada en el hecho real que relata el enfrentamiento furtivo entre el francotirador soviético Vasili Záitsev y el alemán, el mayor König, durante la batalla de Stalingrado.
Se dice que el fundamento de la película es describir el papel de la propaganda en ambos bandos durante la Segunda Guerra Mundial, utilizando la imagen del francotirador como una metáfora de la lucha entre ambos ejércitos.
Enemigo a las puertas Análisis
El principio de la historia nos relata verídicamente el trato que tenían los soldados rusos a la hora de combatir y su filosofía en cuanto a matar a los desertores de su propio bando.
Una mirada cruel e injusta de como actuaba el ejército rojo.
Esta primera parte de la película es totalmente magistral y desgarradora porque no te quieren contar que hay buenos ni malos, si no que fue una guerra, donde el único propósito era matar y aniquilar y donde la gente no importaba.
La segunda y extensa parte del resto de la película, para muchos es lamentable porque dicen que se separa del argumento histórico.
Para mí sigue siendo igual de emocionante e interesante ya que no busco una película 100% real.
El argumento de esta parte nos cuenta como Vasili conoce y se enamora de Tania y de la lucha personal entre Vasili y König.
No hay que olvidar, que tanto Vasili Záitsev como Erwin König existieron de verdad y lucharon en la misma batalla.
También nos cuenta la atracción de Danilov por Tania y sus métodos para apartarla de Vasili, sabiendo la compenetración que existe entre ambos lo cual le produce celos.
Hay escenas que destaco, como el momento donde Danilov le dicta a Vasili lo que tiene que escribir, corrigiéndole en cada palabra que escribe para dar a entender (delante de Tania) de su mayor educación e inteligencia respecto a Vasili.
La escena donde Vassili ve a König a través de un espejo y viceversa, en una escena muy tensa y lograda que te pone en el pellejo de Vasili.
También tenemos la parte tierna de la película la cual recae en “Sascha” que cambia información al alemán por comida.
Sascha nos representa el grado de miseria en el cual vive toda la población y de lo que puedes llegar a ser capaz de hacer por poder llevarte algo a la boca.
Y por último, el primer momento que Vasili dispara al son de las bombas y arremete contra todos los alemanes uno a uno mientras hablan y se duchan.
Reparto
Respecto al reparto, decir que es excepcional:
Jude Law interpreta al francotirador “Vassili Záitsev” de una manera muy creíble y emocional, con cierto nihilismo.
Rachel Weisz está fantastica como “Tania Chernova” que trabaja como traductora interceptando comunicaciones alemanas y acaba enamorándose de Vasili y finalmente, el Comisario Danilov interpretado por Joseph Fiennes que la verdad que lo interpreta bastante bien.
Por otro lado, participa el gran Ed Harris, un clásico en las películas bélicas, dando vida al despiadado comandante alemán “König” y enviado con el único objetivo de matar a Vasili.
Las actuaciones de los cuatros están muy logradas, especialmente la de Ed Harris que me encanta como trabaja.
También recalcar que los escenarios son auténticos, por lo tanto, las escenas dentro de las casas en ruinas y edificios destruidos le da mucho más realismo a la película.
Conclusión final
En conclusión, la película es redonda en todos los aspectos, tiene un buen argumento, buenos actores, una ambientación creíble y real, gran fotografía y un gran apartado sonoro.
Es por lo que le damos un 8 de 10.
Si te gusta el cine histórico combinado con la guerra está película te encantará.
Y la historia “romántica” la veo necesaria para darle más énfasis a los personajes.
Enemigo al acecho Historia real
Enemigo a las puertas está basada en las vivencias reales de Vasili Grigórievich Záitsev que escribió en «Memorias de un francotirador en Stalingrado».
Evidentemente, aquí no aparece nada sobre la historia de amor (esto es inventado) y solo habla de la guerra.
También es complicado saber si Vasili fue el mejor francotirador, pero lo cierto es, que en aquella época los francotiradores apuntaban el número de sus víctimas en una libreta siempre y cuando tuvieran un testigo.
El saldo final apuntado en su libreta fue de 242 bajas alemanas y el Gobierno soviético no dudo en utilizarlo como propaganda ensalzando su figura.
“Ajusté la mirilla a 550 metros y me fijé en si el viento podía desviar el tiro. El humo de la batalla subía en vertical, señal de que ese día apenas soplaba el viento, así que no había necesidad de compensarlo. Siempre me ha intrigado lo de mirar a través de la óptica a un enemigo a cientos de metros. Al principio apenas se ve una silueta pequeña e indistinta, y de pronto puedes distinguir todos los detalles del uniforme, si es alto o bajito, delgado o gordo. En ocasiones tu objetivo está hablando con otro soldado o canturreando para sí. Y mientras tu hombre se frota la frente o inclina la cabeza para ponerse el casco, buscas el mejor punto para que la bala haga impacto”. – Vasili Záitsev
También se utiliza el libro escrito por William Crage, «La batalla por Stalingrado» para relatar las atrocidades de ambos bandos y de como transcurrió dicha batalla.
Enemigo a las puertas Banda Sonora
La banda sonora es sublime, compuesta por James Horner, tiene un ligero parecido a la de “La lista de Schindler” de John Williams.
Es muy acertada, tanto en los momentos de acción como en las situaciones sentimentales.
«El hombre nunca cambiará. Nos hemos esforzado tanto en construir una sociedad equitativa donde no hubiera nada que envidiar al vecino… pero siempre hay algo que envidiar.
Una sonrisa, una amistad, algo que no tenemos y de lo que queremos apropiarnos. En este mundo, incluso en el soviético, siempre habrá ricos y pobres, gente con esperanza y desesperados, ricos en amor y pobres en amor».
